Hoy he salido del instituto con muy mal sabor de boca. Los padres de una alumna se han separado recientemente y por lo visto han acabado tirándose los trastos a la cabeza.
Como suele ocurrir en estos casos, los hijos son moneda de cambio y riqueza para que sean ellos los que decidan cuál de sus progenitores es peor persona.
Esta alumna después de pasar un fin de semana luchando con sus sentimientos, se hizo una piarda el lunes y no entró al instituto.
Hoy me decía llorando, que le iba a estallar la cabeza y que se fue con una amiga a desahogarse.
...
Su madre se había enterado, pero mi alumna no quiere preocuparla y no le dice que está sufriendo por dentro, mientras que su madre cree que no le interesan los estudios (como información diré que esta alumna nunca ha repetido curso).
Este jueves tengo una cita con esa madre para hablar de su hija...
¡Qué injustos somos los adultos intentando resolver nuestros problemas y diferencias!
Este jueves me haría una piarda de la vida para irme a pasear junto a unos lirios y unos naranjos en flor contemplando a las golondrinas volar...
2 comentarios:
Ángeles, qué difícil resulta poder escapar de verdad. Ojalá fuera tan fácil como no ir a clases para ir al cine, o a pasear junto al mar. Pero tú no puedes hacerte una piarda. No puedes ausentarte de ti misma. Tendrás que enfrentarte a esa madre y hacerle ver en la medida que creas oportuno lo que está pasando con su hija.
Ninguna de las dos sabe la suerte que tiene con una tutora como tú.
Ánimo y un beso.
p.d. Si quieres lirios ya sabes dónde hay.
Querida Mirna, tienes toda la razón: no hay que intentar escapar. La verdad es que ni siquiera soy su tutora, sino que, por razones que es mejor olvidar, estoy intentando solucionar un problema grave y me pidieron por favor que yo hablara con esa madre.
Gracias por el ofrecimiento: iré prontito a por alguno de tus lirios.
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